viernes, mayo 16, 2008

Destruyendo un servidor Linux localizado en un datacenter en Canada

No hace mucho en mi anterior trabajo, me asignaron para que le instale Trac, un software de administración de proyectos web con una interface a un repositorio Subversion que recomendé anteriormente. Realmente lo manejo bien, se instalarlo, configurarlo, customizarlo con plugins, manejar el http.conf del apache para publicar otros sitios, entonces me eligieron por eso.

El tema es que tenía que instalarlo en un Linux. Siempre había instalado todo en Windows Server 2003. Tengo experiencia sobre Linux por la facultad, realmente me cae bien el sistema operativo del pingüinito, aunque admito que uso Windows por comodidad.

Igual ese no fue el problema. El problema fue que tenía que instalarlo en un servidor remoto, y solo tenía acceso SSH, que es una simple línea de comando (bajar cosas de internet con una línea de comando no es nada divertido, repito, nada divertido!). Al enterarme eso avise que no era el más apto para la tarea, pero confiaron en mí y yo seguí con la tarea, tratando de dar lo mejor.

Igualmente me llene de frustraciones, me costaba mucho hacer algo, no soy amigo de las consolas ara trabajar en línea de comando y me sentía mal. Estaba siguiendo un tutorial de internet, que más o menos servía. Para instalar Subversion tenía que cambiarle los permisos a una carpeta, no me acuerdo bien porque. Está claro que era administrador, tenía la password del usuario root del Linux. Entonces use el comando “CHMOD 000 /” o algo similar. Ese comando le quita todos los permisos de lectura y escritura a todos los usuarios. Al terminar de correrse ese comando simplemente no pude hacer mas nada, nada de nada, ni correr un “ls” para listar los archivos. Creo que es lo peor que se le puede hacer un Linux, ya que todos los comandos son archivos.

La empresa del cliente estaba en California. El servidor con el Linux al cual yo me conectaba por SSH estaba en un datacenter en Canada. El cliente tuvo que llamar (y pagarle) a alguien para que instale el sistema operativo de nuevo. Gracias a dios el servidor estaba vacío, no tenía datos, sino la cosa hubiese resultado mucho más oscura. Al cliente se le había dicho el riesgo de ponerme a hacer esa tarea, así que las consecuencias no fueron graves. Al final contrataron a alguien competente para hacer la tarea, y me dejaron a mí para que configure el Trac, ya estando este funcionando y utilizando un usuario no root para que no pudiese volver a hacer lo que hice. Para cerrar el tema con una nota graciosa, la password que me asignaron fue: “P3nd3j0”.

No hay comentarios.: